En los últimos años, hemos sido testigos de una creciente transformación en la forma en que nos movemos por las ciudades. Los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) han irrumpido con fuerza en nuestras vidas, ofreciendo una alternativa sostenible, ágil y eficiente para desplazarnos en entornos urbanos. Estos vehículos, propulsados por motores eléctricos y diseñados para una sola persona, han captado la atención de miles de ciudadanos que buscan soluciones de movilidad más ecológicas y económicas. En este artículo, exploraremos qué son exactamente los vehículos vmp, los diferentes tipos que existen, las normas que deben cumplir y las multas asociadas a su incumplimiento.

 

En qué consisten los Vehículos de Movilidad Personal (VMP)

La Dirección General de Tráfico (DGT) indica que vehículos VMP son «un vehículo de una o más ruedas dotado de una única plaza y propulsado exclusivamente por motores eléctricos que pueden dar al vehículo una velocidad máxima de 25 km/h». Esta definición incluye una amplia variedad de vehículos eléctricos diseñados para facilitar la movilidad individual en áreas urbanas y reducir la dependencia de los automóviles tradicionales.

Tipos de Vehículos de Movilidad Personal (VMP)

Dentro de la categoría de VMP, encontramos varios tipos de vehículos que se ajustan a las características definidas por la DGT:

  • Monociclos eléctricos: Se componen de una rueda grande con dos plataformas laterales donde el conductor coloca los pies para mantener el equilibrio.
  • Patinetes eléctricos: Son los más populares y accesibles. Tienen una velocidad máxima de 25 km/h y están equipados con manillar y acelerador.
  • Scooters eléctricos: Similar a los patinetes, pero generalmente cuentan con un asiento y un diseño más robusto para mayor comodidad y estabilidad.
  • Segways: Son plataformas de dos ruedas con un manillar que permiten al conductor mantenerse de pie mientras se desplaza.
  • Hoverboards: Se controlan mediante el equilibrio y la inclinación del cuerpo, no tienen manillar para las manos.

 

Normas de circulación para los VMP

  • La regulación de los vehículos VMP ha evolucionado en los últimos años para garantizar una convivencia segura y ordenada en el entorno urbano. Hasta principios de 2021, las normas de circulación eran responsabilidad municipal, lo que causaba cierta confusión debido a las diferencias entre ciudades. Sin embargo, desde enero de 2021, la DGT aprobó una serie de normas a nivel nacional para el uso de los vehículos VMP:
  • Lugares no permitidos para circular: Los vehículos VMP no pueden circular por aceras, zonas peatonales, vías interurbanas, autovías, autopistas, travesías y túneles urbanos.
  • Límite de velocidad: La velocidad máxima permitida para los vehículos VMP es de 25 km/h.
  • Seguro: Actualmente, no es obligatorio contratar un seguro para utilizar un vehículo VMP, excepto en casos de uso comercial, transporte compartido o turístico, donde se requiere un seguro de responsabilidad civil frente a terceros.
  • Certificado de circulación: Aunque actualmente no es obligatorio, dentro de dos años será necesario contar con un certificado de circulación que garantice el cumplimiento de los requisitos técnicos establecidos.
  • Uso de casco: El uso del casco no está regulado a nivel nacional, quedando a discreción de las ordenanzas municipales. Algunas ciudades imponen el uso obligatorio de casco para menores de 18 años.
  • Conducción bajo los efectos del alcohol y drogas: Los usuarios de vehículos VMP pueden ser sometidos a controles de alcohol y drogas, y las tasas permitidas son las mismas que para conductores de vehículos a motor.

 

Multas por incumplimiento de las normas

El incumplimiento de las normas de circulación para los vehículos VMP puede resultar en multas y sanciones. Algunas de las infracciones más comunes y sus correspondientes multas son:

  • Negarse a realizar el test de alcohol o drogas: Puede considerarse como delito.
  • Uso del teléfono móvil mientras se conduce: Multa de 200 euros.
  • Uso de auriculares mientras se conduce: Multa de 200 euros.
  • No utilizar casco en municipios que lo exijan: Multa de 200 euros.
  • Conducir por aceras y zonas peatonales: Multa de 200 euros, excepto donde esté expresamente permitido.
  • Transportar a más de una persona: Multa de 100 euros.
  • Superar los 25 km/h de velocidad máxima: Multa de 500 euros e inmovilización del vehículo.
  • Conducir bajo los efectos del alcohol: Multa entre 500 y 1000 euros e inmovilización del vehículo.
  • Conducir bajo el efecto de drogas: Multa de 1000 euros e inmovilización del vehículo.

 

Los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) han llegado para quedarse y forman parte de la nueva revolución en la movilidad urbana. Su popularidad se debe a su carácter ecológico, económico y ágil, lo que los convierte en una excelente alternativa para desplazarse por las ciudades. Sin embargo, es fundamental respetar las normas de circulación establecidas para garantizar la seguridad y convivencia en las vías públicas.